Reseña histórica del Regimiento «Blandengues de Artigas»

Regimiento «Blandengues de Artigas» de Caballería N° 1 – «Escolta del Señor Presidente de la República»

El Cuerpo de Veteranos de Blandengues de la Frontera de Montevideo fue creado el 7 de diciembre de 1796, por Decreto del Virrey del Rio de la Plata, don Pedro Mello de Portugal y Villena, siendo su primer sede el cuartel Dragones de Maldonado.

Existen varias interpretaciones con respecto al origen de su nombre, siendo las más aceptadas las que provienen del blandir de las lanzas al ser revistadas, o del blandear por su característica de nómades, ya que su misión les imponía trasladarse de un lugar a otro.

Uno de sus primeros integrantes, fue quien se convertiría en su Jefe inmortal, el Gral. José Gervasio Artigas, quien ingresó como Soldado el 10 de marzo de 1797.

En 1811 los blandengues cabalgaron con el ya Capitán José Artigas hacia la conquista de la independencia, pasando por la gran victoria de la Batalla de las Piedras, los dos Sitios de Montevideo, y por el Éxodo del Pueblo Oriental, dejando atrás sus bienes y riquezas en defensa de sus ideales.

Casi disueltos sus remanentes se reorganizaron en la Gesta Emancipadora, participando en la Batalla de Sarandí, Ituzaingó y Camacuá, entre otras.

Con diversas denominaciones hasta 1829, donde recibe el nombre de “Regimiento 1º de Caballería”.

En el año 1858 recibe su misión de escolta Presidencial.

El 25 de Agosto de 1910 recibe su actual denominación, de Reg. “Blandengues de Artigas” de C. Nº 1, en honor a quienes con sus lanzas forjaron las paginas mas doradas de nuestra historia. Ese mismo día se inaugura la actual sede, la cual es obra del Gral. Arquitecto Alfredo R. Campos.

Parte de esta rica historia el Regimiento la lleva en cada una de las actividades en la cual concurre, un Blandengue moreno, representando a Ansina, el más fiel de los soldados de Mi General, trae de tiro un caballo moro, ultima cabalgadura que reclamó el prócer desde su ultimo lecho, tiene puesto su apero y su sable, siempre pronto, esperando que nuestro Jefe monte para mostrarle el filo de su sable al invasor. Trae un perro cimarrón, única raza canina originaria de nuestro país, ellos representan nuestra libertad e independencia, y es nuestro compromiso mantenerlas por las palabras o por las armas. Como dijo el prócer a Lecor ante su propuesta de rendición: “Dígale a su Jefe, que el día que no tenga mas soldados, lo pelearé con perros cimarrones”.

Orgullosos de nuestra historia, somos los custodias de sus valores, vestimos solemnes su uniforme, y recibimos la herencia de ser montados.


Descanse Mi General, Sabremos Cumplir, aunque en el intento, tengamos la gloria de chocar estribos con estribos donde se encuentre, galopando por los Escuadrones de todos los Orientales que han dado su vida en el intento.
Descanse Mi General, Sabremos Cumplir, la Patria continuará libre y soberana mientras haya un Blandengue.